Una de las sorpresas más agradables en cuestión musical fue saber que los vascos Aiumeen Basoa largaban por fin un disco completo. Y es que esta banda significa mucho para un servidor, ya que, alla por el año 2000 realizaba mi primer compra por correo a un sello holandés y uno de los primeros discos que encargue fue el genial "Triarchy of Vasconia", un split entre Adhur, Ilbeltz y quienes hoy nos ocupan, Aiumeen Basoa (obviamente, todos del Pais Vasco, aclaro porque siempre hay despistados). Lo que me hizo aventurarme a tal compra (imaginen, por aquel entonces no era muy fácil el acceso a música mas under como hoy en dia y había que pensar mil veces a la hora de encargar los discos) fue el tema Aintzinako Guduen Oroimenak, que venia en un compilado de una revista española, y tal vez uno de los temas más hermosos que escuche en mi vida, pero de eso voy a hablar un poco mas adelante.
En fin, hace unos meses husmeando por internet me di con que este año, casi una década después de aquel tremendo disco compartido (y mas de 15 años despues de haberse formado, ya que arrancaron en 1994), editan su primer obra, llamada Iraganeko Bide Malkartsutik y que para mi sorpresa, continua en la exquisita linea de los temas que aparecian en el "Triarchy of Vasconia". Sorpresa digo porque, en estos tiempos en que muchas bandas cambian tan radicalmente de estilo de una dia para el otro, despues de haber pasado 9 años la cosa pudo haber sido bien distinta, pero por suerte no fue asi. Lo de estos vascos es belleza y una calidad notable en forma de folk black metal de temática pagana, si bien los términos black metal y belleza no tienen nada que ver (por lo menos en mi idea de lo que son ambas cosas), Aiumen Basoa los une de una forma tan magistral que la magia es instantanea y de toque estamos en medio de enormes bosques hechizados del pais vasco. La melodia es la principal protagonista en este trabajo, y es que las partes acústicas son impagables, excelsas, preciosas y podria decir todos los adjetivos relacionados que se me ocurran, a la altura de los mejores Empyrium o Tenhi (obviamente en estilos completamente diferentes).
Ya lo mencioné antes, Aintzinako Guduen Oroimenak es una de las canciones mas hermosas que escuche en mi vida, mas precisamente los 5 minutos finales. Es como morirse y estar en el cielo, siempre digo lo mismo. Y lo mejor que es que en Iraganeko Bide Malkartsutik lo hacen IGUAL al split, obvio que con tecnologia 2010, pero respetando las voces, las melodias, todo. La emocion me inunda, al igual que en "Akelarrearen Sua" y ese mágico comienzo folk, con acordeones y flautas llorando música acompañados de la voz de Oihane (la chica del grupo). "Ekaitzaren Begitik" es la balada que nos asesina el corazón, donde Oihane vuelve a ser portagonista junto a Mikelot (guitarrista y voces limpias). El black metal dice presente en temas como "Aiumeen Basoa / Arlekina" (el otro tema que aparece en el split, hecho tambien a la perfección), el comienzo de "Jentil Odola" o las partes mas violentas del ya mencionado "Akelarrearen Sua". Otra cosa para destacar es el elemento celta de su música, de gran protagonismo, ya sea en partes mas pesadas como en las partes mas atmosféricas, una clara muestra es el tema que abre la placa, "Kantauriko Trabain Erruak", por ejemplo. Sin lugar a dudas, una obra maestra del folk metal que seguro disfrutaran a pleno los seres mitológicos de los bosques y que acomodaran al lado de sus discos de Numen (otra gran banda del Pais Vasco) o Heol Telwen, ambas propuestas similares aunque con mas enfasis en la parte black/guerrera.
La música de Aiumeen Basoa estuvo dormida en el tiempo y despertó joven, hermosa e intacta, para venir a tomarnos la mano y llevarnos a volar por los imponentes paisajes de Euskal Herria. Resistirse seria como estar loco.
En fin, hace unos meses husmeando por internet me di con que este año, casi una década después de aquel tremendo disco compartido (y mas de 15 años despues de haberse formado, ya que arrancaron en 1994), editan su primer obra, llamada Iraganeko Bide Malkartsutik y que para mi sorpresa, continua en la exquisita linea de los temas que aparecian en el "Triarchy of Vasconia". Sorpresa digo porque, en estos tiempos en que muchas bandas cambian tan radicalmente de estilo de una dia para el otro, despues de haber pasado 9 años la cosa pudo haber sido bien distinta, pero por suerte no fue asi. Lo de estos vascos es belleza y una calidad notable en forma de folk black metal de temática pagana, si bien los términos black metal y belleza no tienen nada que ver (por lo menos en mi idea de lo que son ambas cosas), Aiumen Basoa los une de una forma tan magistral que la magia es instantanea y de toque estamos en medio de enormes bosques hechizados del pais vasco. La melodia es la principal protagonista en este trabajo, y es que las partes acústicas son impagables, excelsas, preciosas y podria decir todos los adjetivos relacionados que se me ocurran, a la altura de los mejores Empyrium o Tenhi (obviamente en estilos completamente diferentes).
Ya lo mencioné antes, Aintzinako Guduen Oroimenak es una de las canciones mas hermosas que escuche en mi vida, mas precisamente los 5 minutos finales. Es como morirse y estar en el cielo, siempre digo lo mismo. Y lo mejor que es que en Iraganeko Bide Malkartsutik lo hacen IGUAL al split, obvio que con tecnologia 2010, pero respetando las voces, las melodias, todo. La emocion me inunda, al igual que en "Akelarrearen Sua" y ese mágico comienzo folk, con acordeones y flautas llorando música acompañados de la voz de Oihane (la chica del grupo). "Ekaitzaren Begitik" es la balada que nos asesina el corazón, donde Oihane vuelve a ser portagonista junto a Mikelot (guitarrista y voces limpias). El black metal dice presente en temas como "Aiumeen Basoa / Arlekina" (el otro tema que aparece en el split, hecho tambien a la perfección), el comienzo de "Jentil Odola" o las partes mas violentas del ya mencionado "Akelarrearen Sua". Otra cosa para destacar es el elemento celta de su música, de gran protagonismo, ya sea en partes mas pesadas como en las partes mas atmosféricas, una clara muestra es el tema que abre la placa, "Kantauriko Trabain Erruak", por ejemplo. Sin lugar a dudas, una obra maestra del folk metal que seguro disfrutaran a pleno los seres mitológicos de los bosques y que acomodaran al lado de sus discos de Numen (otra gran banda del Pais Vasco) o Heol Telwen, ambas propuestas similares aunque con mas enfasis en la parte black/guerrera.
La música de Aiumeen Basoa estuvo dormida en el tiempo y despertó joven, hermosa e intacta, para venir a tomarnos la mano y llevarnos a volar por los imponentes paisajes de Euskal Herria. Resistirse seria como estar loco.
Hristo
d o w n l o a d
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