Luego de su, a mi gusto, pobre y aburrido "Gothic Kabbalah", Therion vuelve a la carga y nos regala "Sitra Ahra" que nuevamente centra su temática en el misticismo cabalístico judío. Vale aclarar que la mayoría de las canciones fueron compuestas en la época de Lemuria y Sirius B y que Johnsson las tenía por ahí, esperando el momento oportuno para grabarlas y editarlas.
Musicalmente "Sitra Ahra" es un vertiginoso paseo por los lugares más insólitos de la creatividad del bueno de Christofer, que no dudó en meter arreglos, orquestaciones, coros, violines y un largo etcétera.
Así podemos disfrutar de la apertura con "Introduction Sitra Ahra" donde el coro de gordas soprano se luce, dandonos la bienvenida a todo pulmón. La cosa se pone épica con "Kings of Edom", donde la paleta del artista comienza a adivinarse y saca a relucir algunos de tantos recursos que tiene Johnsson como compositor. "Unguentum Sabbati" (con un marcado "homenaje" a "El Fantasma de la Opera") y "Land of Canaan" (la más extensa del disco) conjugan los pesados riffs de guitarra con solemnes coros operísticos y un aire místico flotando por el aire.
Analizar concienzudamente el resto del disco sería una tarea ardua, pero vale rescatar a grandes rasgos el gancho de los coros de "Hellequin", la garra de Tomas Vikstrom (ex Candlemass) y la presencia del nuevo guitarrista rítmico, el argentino Christian Vidal (ex Cuero) en "2012"; la violencia de "Din" con una clara vuelta a las raíces del death metal mezclado con los agudos de Snowy Shaw, que sigue siendo parte del equipo y el coro de niños en la pieza final "Children of the Stone (After the Inquisition)" que recuerda vagamente "Siren of the Woods" de "Theli". Peron sin duda, todo lo que se pueda aquí describir será poco ante la avalancha de matices, arreglos, ideas y orquestaciones que hace gala "Sitra Ahra" a la hora de escucharlo con atención.
Un disco por demás exótico de Therion (y por momentos sobrecargado) que viene muy bien para escuchar solo (con auriculares sería lo ideal) o acompañado, (quizás en alguna tertulia o reunión temática con unos buenos vareñikes, jrein, kreplaj y demás delicias del arte culinario hebreo para que la experiencia sea completa). Pues bien, sin ser lo mejor del grupo "Sitra Ahra" es mucho más seductor que "Gothic Kabbalah" y es, sin duda, uno de los grandes destacados del año.
alien
d o w n l o a d
BONUS
Musicalmente "Sitra Ahra" es un vertiginoso paseo por los lugares más insólitos de la creatividad del bueno de Christofer, que no dudó en meter arreglos, orquestaciones, coros, violines y un largo etcétera.
Así podemos disfrutar de la apertura con "Introduction Sitra Ahra" donde el coro de gordas soprano se luce, dandonos la bienvenida a todo pulmón. La cosa se pone épica con "Kings of Edom", donde la paleta del artista comienza a adivinarse y saca a relucir algunos de tantos recursos que tiene Johnsson como compositor. "Unguentum Sabbati" (con un marcado "homenaje" a "El Fantasma de la Opera") y "Land of Canaan" (la más extensa del disco) conjugan los pesados riffs de guitarra con solemnes coros operísticos y un aire místico flotando por el aire.
Analizar concienzudamente el resto del disco sería una tarea ardua, pero vale rescatar a grandes rasgos el gancho de los coros de "Hellequin", la garra de Tomas Vikstrom (ex Candlemass) y la presencia del nuevo guitarrista rítmico, el argentino Christian Vidal (ex Cuero) en "2012"; la violencia de "Din" con una clara vuelta a las raíces del death metal mezclado con los agudos de Snowy Shaw, que sigue siendo parte del equipo y el coro de niños en la pieza final "Children of the Stone (After the Inquisition)" que recuerda vagamente "Siren of the Woods" de "Theli". Peron sin duda, todo lo que se pueda aquí describir será poco ante la avalancha de matices, arreglos, ideas y orquestaciones que hace gala "Sitra Ahra" a la hora de escucharlo con atención.
Un disco por demás exótico de Therion (y por momentos sobrecargado) que viene muy bien para escuchar solo (con auriculares sería lo ideal) o acompañado, (quizás en alguna tertulia o reunión temática con unos buenos vareñikes, jrein, kreplaj y demás delicias del arte culinario hebreo para que la experiencia sea completa). Pues bien, sin ser lo mejor del grupo "Sitra Ahra" es mucho más seductor que "Gothic Kabbalah" y es, sin duda, uno de los grandes destacados del año.
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